— “Descripción General”

Hay Acordes Nulos construidos para ofrecer refugio, y hay redes construidas para guiar y proteger. Y luego, está El Foso.

Esta megaestructura no tiene un número de designación común porque no es parte de la red defensiva estándar de Nueva Babilonia. No es un "Acorde Nulo". Es EL Acorde de Contención. No es un pilar, es una muralla continua y masiva que se extiende por cientos de kilómetros, una cicatriz de hormigón fonoabsorbente negro que corta la Península Ibérica del resto del continente europeo. No fue construido para durar, sino para sellar. Una tumba a escala continental.

La función de esta muralla no es proteger lo que hay dentro de lo que hay fuera. Su único y terrible propósito es proteger al resto del mundo de lo que sea que haya quedado dentro.

— “Función Principal”

Tras el Incidente de París (E-NB01), cuando el enfrentamiento final entre el Ange Noir y la entidad desconocida dejó una "herida" conceptual en la realidad, la decisión más drástica en la historia de Nueva Babilonia fue tomada. La Península Ibérica, con la anómala Zona Muerta de París en su corazón y sus tierras ahora desconectadas de la red de Supresores, fue declarada Zona de Sacrificio.

• Contención Absoluta: La muralla no solo absorbe el sonido; anula por completo la Sonata en sus inmediaciones, creando un "foso" de silencio de kilómetros de ancho. Su propósito es actuar como una jaula impenetrable, para asegurarse de que cualquier anomalía que pueda haber nacido o evolucionado en la península durante quince años de aislamiento total, nunca escape.
• Territorio Desconocido: Nueva Babilonia no tiene ningún conocimiento de lo que ocurre actualmente dentro de la península sellada. Se presume que los Oyentes han evolucionado sin control, que la Sonata salvaje ha creado nuevos tipos de monstruos, o peor aún, que el propio "Tajo de Silencio" de París se ha expandido.

— “Estructura y Mantenimiento”

"El Foso" es una estructura sombría y hostil. No tiene puertas. No tiene puntos de acceso. Es un muro continuo de un material negro que parece absorber la luz, custodiado en su lado "seguro" por una serie de fortalezas automatizadas del Comité de Defensa. No hay personal humano patrullando sus muros. Las órdenes son claras: cualquier cosa que se acerque a la muralla, desde cualquier lado, debe ser desintegrado por la artillería sónica automática. Sin excepciones.

Una nota final, extraída del manual de operaciones del perímetro:

“BAJO NINGUNA CIRCUNSTANCIA SE ACERQUEN A LA MURALLA.”

— “Curiosidades y Archivos Clasificados”

• El "Lamento de Ícaro": La muralla no es completamente silenciosa. Aquellos estacionados en las fortalezas de vigilancia más cercanas informan de una única y constante frecuencia de baja intensidad que parece emanar de la propia muralla, un "lamento" estructural. Los analistas creen que es el sonido de la megaestructura soportando una presión sónica o conceptual inimaginable desde el otro lado.
• "Los Observadores Silenciosos": Las cámaras de largo alcance a veces captan movimiento en la cima de la muralla, del lado sellado. Las figuras no son Oyentes. Son humanoides, pero anormalmente altos y delgados, y simplemente se quedan allí, inmóviles durante horas, "observando" el lado de Nueva Babilonia antes de desaparecer de nuevo en la niebla sónica. Nadie sabe quiénes o qué son.