Nombre Clave: |
El Mar Durmiente / Sienas del Sáhara |
Categoría: |
Zona de Frecuencia Hipnótica / Zona Muerta Relativa |
Ubicación: |
La mayor parte del Desierto del Sáhara, Norte de África. |
Estado Actual: |
Efectivamente Intransitable. Considerado un laberinto natural infranqueable. La supervivencia a largo plazo dentro de sus límites es teóricamente imposible. |
— “Descripción General”
Las Sienas del Sáhara, apodadas por los pocos que han regresado de sus bordes como "El Mar Durmiente", son una de las anomalías sónicas más vastas y enigmáticas del planeta. A diferencia de las violentas tormentas sónicas de otras ruinas, la amenaza aquí no es el ruido, sino una quietud antinatural y seductora.
El desierto entero está impregnado de una "disonancia de baja frecuencia" constante, una monótona "canción de cuna" a escala continental. No es una frecuencia que dañe físicamente; es una que ataca la voluntad. La resonancia induce un estado de somnolencia perpetua y una apatía profunda en casi toda forma de vida biológica. Entrar en el Mar Durmiente es someterse a un canto que promete descanso, un descanso del que nadie despierta.
— “Origen de la Anomalía”
El origen de la frecuencia es un misterio, pero las principales teorías apuntan a una combinación única de factores:
- Geología Resonante: Se cree que la inmensa cantidad de cuarzo y otros minerales cristalinos en las arenas del Sáhara actúan como un gigantesco resonador pasivo. La energía de la Sonata que bombardea la región no se refleja ni se vuelve caótica; es absorbida, ralentizada y reemitida en esta única y aplastante frecuencia hipnótica.
- Eco de un Mundo Silencioso: Otra teoría más mística, sugiere que el desierto, un lugar de profundo silencio en el mundo pre-Sonático, está intentando "recordar" esa paz. El Mar Durmiente sería la "memoria" sónica de un silencio perdido, una nostalgia tan poderosa que impone su deseo de quietud sobre todo lo que entra.
— “Fenómenos Conocidos y Efectos”
- El Letargo Eterno: El efecto más documentado. Los equipos de reconocimiento que se adentran en el desierto informan de una fatiga abrumadora en cuestión de horas. Los Supresores personales solo retrasan lo inevitable. Las comunicaciones se llenan de voces cansadas y arrastradas antes de silenciarse. Las imágenes de drones no tripulados muestran vehículos y equipos de expediciones perfectamente intactos, medio enterrados en la arena, sus ocupantes dentro, dormidos para siempre.
- La Arena que Absorbe el Sonido: La arena misma parece ser un "Acorde Nulo" natural. Absorbe activamente el sonido, haciendo que los combates sean extrañamente silenciosos y desorientadores. Un disparo de rifle suena como un simple chasquido, y el rugido de un motor se convierte en un murmullo. Este efecto hace que la voluntad de luchar se desvanezca junto con la energía.
- Las Ciudades Ocultas: El rumor más persistente y verificado es que la Sonaria teocrática de Medio Oriente no solo ha sobrevivido en este entorno, sino que lo ha dominado. Se dice que sus Compositores-sacerdotes han aprendido "contramelodías" y "ritmos" sagrados que les permiten contrarrestar la frecuencia del letargo. Se cree que han construido sus Noctaras más sagradas en oasis en lo profundo del Mar Durmiente, usando la apatía del desierto como el escudo definitivo, un foso que ninguna otra nación puede cruzar.
— “Curiosidades y Archivos Clasificados”
- Los "Espejismos Acústicos": Viajeros en los bordes del desierto a menudo informan haber "escuchado" oasis que no existen, o el sonido de ciudades bulliciosas en el horizonte. Se teoriza que la frecuencia hipnótica también afecta a la percepción, creando alucinaciones auditivas complejas, verdaderos "espejismos" hechos de sonido.
- El Guardián del Silencio: Las leyendas hablan de una entidad única que vive en el corazón del desierto. No es un Oyente ni una bestia, sino un "Guardián del Silencio", quizás un antiguo Soundkeeper o una anomalía de la Sonata que se ha convertido en el director de la orquesta del letargo.
- El "Corazón Latente": Sondas de penetración terrestre enviadas antes de fallar detectaron una anomalía geológica masiva bajo el centro del Sáhara. No es tectónica. Es rítmica. Una pulsación increíblemente lenta, un "latido" que ocurre una vez cada varias horas. Nadie sabe qué es, pero algunos creen que es la verdadera fuente de la canción de cuna.