La Sonata que reescribió el mundo es una fuerza neutral, una ley física como la gravedad. Pero en la frágil biología de la humanidad, esa música cósmica encontró un eco perverso. El resultado es la amenaza más omnipresente y trágica del nuevo mundo.

Un Oyente es el resultado final de la Enfermedad Sonática. Son lo que queda de un ser humano cuando su estructura armónica interna colapsa y es consumida por la disonancia pura. No son simplemente monstruos; son un recordatorio andante de la fragilidad de nuestra propia composición, una melodía maldita que aún conserva rastros distorsionados de la humanidad que perdieron. Son el eco de un grito que nunca termina.


— “Origen y Propagación”


— “Clasificación General”

Se han clasificado a los Oyentes a lo largo de la historia en varias categorías basadas en su nivel de mutación y peligro.

1. Susurrantes

2. Resonantes

3. Discordantes