Frente a la abrumadora realidad de la Sonata, la humanidad era, en un principio, completamente inútil. Una audiencia aterrorizada en un concierto cósmico que no habíamos elegido, escuchando una música que nos mataba, nos transformaba y nos enloquecía. La supervivencia se basaba en el sigilo, en la resistencia pasiva, en el silencio. Luchar contra la Sonata misma era como intentar detener un tsunami con las manos desnudas. Era imposible.
Pero la evolución, en su fina y a menudo cruel sabiduría, siempre encuentra una forma de componer una contramelodía.
Con el paso de las primeras décadas tras el Gran Silencio, comenzaron a nacer niños. Niños poco comunes. Niños cuya firma genética, en lugar de ser desgarrada por la nueva física del mundo, parecía entrar en armonía con ella. Manifestaban una afinidad con la Sonata tan natural como respirar, capaces de "sentir" sus flujos, "escuchar" sus notas ocultas y, de formas rudimentarias al principio, "tocarlas" con su propia voluntad.
A estos individuos se les dio muchos nombres en los primeros días: los "Afinados", los "Cantores", los "Ecos". Pero con el tiempo, a medida que su poder se comprendió y se convirtió en el pilar de la nueva sociedad, se les conoció con un solo título que definía su propósito: “Soundbringer”.
Un Soundbringer es un ser humano cuya composición biológica y espiritual le permite interactuar directamente con la Sonata. Son los únicos individuos capaces de manipular la resonancia ambiental a su favor, transformando la fuerza más peligrosa de la tierra en una herramienta, un escudo y un arma.
Para lograrlo, necesitan un conductor, un medio a través del cual enfocar su voluntad y su don innato. Este medio es un instrumento musical, especialmente diseñado y a menudo fusionado con tecnología militar. A través de este, un Soundbringer puede pintar sobre el lienzo de la realidad, convirtiendo su intención en una nota tangible con efectos devastadores o milagrosos.
Cada Soundbringer es único. Su afinidad con la Sonata, la naturaleza intrínseca de su alma y el instrumento que elige para expresarse, todo ello se combina para crear un "músico" con un estilo y un potencial completamente distintos.
El surgimiento de los Soundbringers lo cambió todo. La humanidad pasó de ser una presa a ser una depredadora. La estrategia de supervivencia ya no era solo la contención, sino la dominación. Los Soundbringers se convirtieron rápidamente en el pilar fundamental de la nueva civilización, su influencia reescribiendo los conceptos mismos de poder, defensa y guerra.